El veredicto que ha dado la razón a Apple en su demanda por plagio contra Samsung puede marcar un antes y un después en el mundo de la telefonía móvil. Y es que, si no prospera el recurso de la compañía coreana, no sólo ella tendría que modificar sus productos, sino que el resto de marcas también tendrían que hacerlo para no ser las próximas en ser demandadas. Y es que algunos de los aspectos que Apple ha considerado como plagio son los iconos parecidos a los diseñados por ellos o el gesto de “pellizcar” la pantalla para ampliar las fotos. Cosas que existen en la mayoría de los smartphones del mercado, y que podrían estar llamadas a desaparecer.
La empresa coreana, por ello, quiere separar el veredicto de las consecuencias que pueda tener para ellos. Insisten en que es un golpe para todo el mercado. En una nota de prensa, sus dirigentes aseguran que “no debe entenderse como una victoria para Apple, sino como una derrota para los consumidores norteamericanos. Derivará en una reducción de modelos, menos innovación y posiblemente precios más altos”.
Y es que la mayoría de los smartphones que utilizan el sistema operativo Android, que ya hoy en día está insertado en terminales de casi todas las marcas, incumplirían estas patentes de software del mismo modo en el que, según el tribunal estadounidense, lo hacen los modelos de Samsung. Por ello, una gran cantidad de fabricantes se verían afectados por este entuerto. Porque es cierto que el iPhone fue el primer smartphone tal y como los conocemos hoy en día, y todos los modelos que han venido después se parecen a él en algunos aspectos. Por lo tanto, esta sentencia puede suponer una auténtica revolución en el mercado móvil.