Mañana es el día en el que acercándote a una tienda oficial o autorizada por Apple, podrás hacerte con uno de los nuevos y flamantes iPhone 6. Sin embargo, Apple volvió a liarla de la peor manera posible ayer miércoles lanzando la primera actualización de iOS 8.
iOS 8.0.0 llegó con problemas y bugs ya reportados por los usuarios, que tenían que ver, dependiendo del modelo con el que cuentan, con errores de conexión WiFi, una consumo de batería exagerado, problemas con la nueva fototeca del sistema operativo, así como una considerable bajada de rendimiento con respecto a la última versión de iOS 7.
A estos problemas, hay que añadirle otro más que estaba relacionado con la aplicación de Salud o Health y que impidió un correcto funcionamiento con las aplicaciones de fitness que ya estaban preparadas para el salto a iOS 8.
Apple lanzó apresuradamente la actualización a iOS 8.0.1 vía OTA o iTunes pero ya se sabe lo que dice el refrán; “las prisas no son buenas consejeras” o el de “El que va deprisa se tropieza”. La actualización fue retirada inmediatamente tras las primeras sorpresas de los usuarios de los nuevos teléfonos; los iPhone 6 y 6 Plus se quedaban sin cobertura de red y sin poder utilizar Touch ID, ensombreciendo el lanzamiento de los nuevos productos y consiguiendo el considerable enfado de esos usuarios que acababan de estrenar un teléfono carísimo.
La actualización ha sido retirada para evitar males mayores y Apple ha afirmado que están trabajando a contrarreloj para solucionar los fallos anteriores y los causados por esta versión. Mientras tanto instan a restaurar el terminal a los afectados a iOS 8.0 desde iTunes.