La compañía Gradiente Eletronica, que se dedica a la fabricación de electrónica de consumo, registró la marca “iphone” en el año 2000, mientras que Apple no registró hasta 2007 este nombre ahora popular en todo el mundo.
El próximo miércoles 13 de febrero será la fecha en la que Insituto Brasileño de Propiedad Intelectual tendrá que hacer pública la decisión definitiva a este respecto, aunque las filtraciones que han aparecido en la prensa dan a entender que va a decidirse por darle la razón a Gradiente Eletronica. En ese caso, Apple podría recurrir antes de que le obligaran a retirar el nombre de iPhone.
Aunque como hemos dicho hace 7 años que Gradiente registró el nombre de iPhone, el smartphone con esa denominación se puso a la venta el pasado mes de diciembre. Y es que Brasil es un país que ha tardado un poco en subirse al carro de los teléfonos inteligentes, pero actualmente este mercado está en plena expansión, por lo que prevemos una guerra encarnizada por la marca entre las dos compañías.
El iPhone brasileño, con sistema operativo Android, se vende por 599 reales (221 euros) y está disponible tanto en blanco como en negro, los mismos colores que el terminal de Apple.