En Internet vemos un sin fin de historias delirantes y que nos sorprenden cada día. Pero otras veces quienes protagonizan esas historias son los mismos personajes de la red. Una de las personas más populares y poderosas hoy en día es Mark Zuckerberg y su red social Facebook.
La historia comenzó con un hombre israelí llamado Rotem Guez. El hombre había creado una empresa denominada “Like Store”, una tienda virtual que vendía los “me gusta” de Facebook y que durante un tiempo tuvo un gran éxito con anunciantes y empresas. Pero a la gente de la red social poco les gustó esto y no dudaron en enviarle una carta amenazándole con una demanda millonaria, alegando que sus acciones eran ilegales y violaban las condiciones de uso de la red.
Rotem Guez pareció no importarle esta carta y continuó con su actividad. De hecho, incluso llegó a creer que era una broma. Al ver que no había respuesta por parte del hombre, Facebook decidió cerrar su cuenta personal. Pero la historia no concluye aquí. Ante esta acción, el hombre reaccionó de una manera inesperada.
Sin avisar a su esposa ni a nadie de su familia, decidió cambiarse el nombre. Se presentó en las oficinas del ministerio del interior y decidió cambiarse el nombre por el de Mark Zuckerberg. Si bien la supervisora reconoció que el nombre era el mismo que el del creador de Facebook, finalmente terminó aceptando el cambio de nombre.
De esta forma, el Mark Zuckerberg israelí -antes conocido como Rotem Guez- deberá llevar el mismo nombre que el creador de la red social por lo menos durante siete años -período en que una persona puede cambiar su nombre-.
¿Será este el comienzo de una guerra entre Facebook y Mark Zuckerberg? Faltará ver como reacciona la red social y que acciones toma contra el nuevo Mark Zuckerberg.
Vía | El Mundo