Tras el lanzamiento de iPad, la mayoría de las empresas del sector sacaron a la venta sus propios modelos de tablets, pero no consiguieron acercarse ni de lejos a lo que ofrecía Apple. Hasta ahora, ya que Samsung Galaxy Tab 10.1 se muestra como la gran competidora del iPad2.
En enero se puso en marcha Honeycomb, la versión de Android para tablets, pero aunque muchos han intentado aprovecharlo, lo cierto es que lo que había hasta ahora en el mercado se parecía más a la primera versión de iPad que al modelo actual.
Samsung Galaxy Tab 10.1 se nos presenta con una superficie frontal completamente plana, sin un sólo botón, ya que tanto estos como las ranuras para tarjetas se encuentran en el lateral.
Una de las ventajas de esta tableta frente al iPad 2 es que con sólo conectarla al ordenador nos lo detectará como un disco extraíble y podremos pasar la información fácilmente, sin el engorroso trámite de que todo tenga que pasar primero por iTunes.
El mayor problema es que para Android no hay la cantidad de programas que existen ya para iOS. Por ejemplo, cuando queramos editar un vídeo no nos será fácil encontrar una aplicación adecuada para hacerlo desde la propia tablet con facilidad.
Y es que, por mucho que algunos queramos resistirnos al universo de Steve Jobs, en el Android Market aún no hay aplicaciones demasiado buenas que nos permitan hacer cosas que con un iPad 2 haríamos de forma sencilla.
De todas formas, la tablet viene ya equipada con un software bastante decente, con reproductores de libros electrónicos y de música, Google Maps y aplicaciones para gestionar redes sociales.
Si queremos una Samsung Galaxy Tab 10.1 libre nos saldrá por unos 500€, pero Vodafone y Orange la ofrecen si contratamos una tarifa de datos desde 199.