La Blackberry es hasta ahora el smartphone favorito de los adolescentes, pero parece que hasta ellos se están cansando de ella. Y es que el fuerte empuje de Apple y Google en el mercado de los dispositivos móviles ha provocado el primer descenso en las ventas de la compañía RIM desde 2006. Y eso no es lo peor, sino que este bajón en las ventas del 25% han provocado la pérdida de 125 millones de dólares, lo que pone a la compañía en serios problemas financieros.
El pasado 3 de marzo RIM cerró el cuarto trimestre de su ejercicio fiscal de 2012, en el que se vendieron 11,1 millones de teléfonos y medio millón de tablets. Las ventas esperadas eran mucho mayores. Para el conjunto de 2011, las ventas cayeron estrepitosamente quedando reducidos por tres los beneficios totales. Además, Jim Balsillie abandonó el consejo de administración.
Por otra parte, también se marcha el actual jefe tecnológico, David Yach, así como el director de operaciones, Jim Rowan. Tras presentar estos resultados, las acciones de la compañía cayeron un 8%.
Estos resultados tan negativos son los primeros desde que Thorsten Heins es consejero delegado de la compañía. La empresa espera que este ejecutivo de origen alemán logre cambiar las fortunas de la sociedad y haga frente a la creciente competencia que está superando con creces a la Blackberry en el negocio de los smartphones.
En RIM esperan que la situación mejore con el lanzamiento de la décima versión de su sistema operativo, que lanzará antes de que acabe 2012. Dentro de un par de meses se espera que se presenten los prototipos de los dispositivos que funcionarán en la nueva plataforma. Pero los inversores no terminan de verlo claro y el precio de las acciones de la compañía se redujo un 75% en un año, pese a que se haya recuperado casi un 10% desde el mínimo al que se llegó hace algunas semanas.