Los datos de venta de la Xbox, especialmente desde la aparición de Kinect, han dejado atrás a la mismísima Playstation 3.
A pesar de que la consola de Sony se encuentra muy cerca, el panorama es muy diferente al de la generación anterior, donde Playstation 2 dominaba con soltura el mercado. Claro que ambas siguen estando lejos de Wii, que domina el mercado desde que saliera a la venta.
Una de las principales bazas que ayudan a la buena marcha de la Xbox ha sido el lanzamiento de Kinect, que ha dado un nuevo impulso a la plataforma. En el último trimestre Microsoft ha logrado vender más de un millón y medio de consolas, que no está nada mal para una máquina de seis años de historia y las ventas de Kinect en mayo habían superado los 10 millones, aunque no tenemos cifras más actualizadas.
Ahora tanto Xbox como Playstation tendrán que ponerse las pilas si quieren seguir conservando sus opciones de liderar el mercado. Nintendo ha empezado ya la transición hacia su siguiente gran plataforma de juegos y es más que probable que Sony y Microsoft se aceleren a la hora de buscar nuevos retos, así que más o menos se puede decir que, salvo milagro navideño, esta generación de consolas está a punto de terminar. Microsoft, por lo pronto, ha lanzado un nuevo modelo de Xbox que hará las delicias de los más frikis, decorada como el robot R2-D2 de La Guerra de Las Galaxias y con un mando dorado inspirado en su compañero C3-PO. Por supuesto, en el lote va incluido el Kinect y el juego de la película que usa el nuevo accesorio como control. No ofrece ninguna novedad, pero satisface los deseos de muchos coleccionistas. El pack saldrá a la venta por 450 dólares antes de que termine el año.