Si en verano tenemos la suerte de estar de vacaciones y más aún pasándolas fuera de casa, probablemente no estemos mucho tiempo dentro del hotel donde poder recargar nuestros gadgets. Como las nuevas baterías que nos duren semanas aún no han llegado, tenemos que conformarnos con comprar una batería externa para nuestro smartphone.
Tenemos dos opciones, por un lado si nuestro teléfono tiene la batería desmontable, podremos comprarnos una batería con cargador extra para aguantar el día. Si por el contrario no es desmontable, algo cada día más habitual, tenemos otras dos opciones, o una carcasa con batería -normalmente sólo disponible para modelos muy demandados- o una batería externa universal.
Como batería externa universal me refiero a aquellas que no sólo nos permiten recargar nuestro smartphone, sino prácticamente cualquier gadget USB que tengamos a mano, como una cámara de fotos o vídeo, un tablet, un modem 3G/4G etc. Son muy versátiles y las tenemos disponibles en varios tamaños.
Del tamaño dependerá el número de veces que podremos recargar nuestro dispositivo. Si nuestro smartphone tiene una batería de 1500 mAh, tendremos que buscar una batería de al menos la misma cantidad si queremos que lo recargue al 100%, u otra batería con al menos 4000 mAh, para que pueda recargarlo al menos dos veces.
Otra característica que tenemos que tener en cuenta, es la potencia de salida de estas baterías. Normalmente utilizan 1A, pero si queremos cargar un tablet, necesitaremos de una batería donde al menos uno de sus puertos, sea de 2A.
Lo último que quedaría sería seleccionar una batería para nuestras necesidades. Podéis comprar una que aunque no os recargue completamente el móvil sea de un tamaño pequeño y ligero para llevar siempre enzima, pero si ya pensáis en algo más grande, tampoco os paséis porque una de más de 8000 mAh puede recargar varias veces el teléfono, pero son grandes y pesadas incluso para llevarlas todo el día en la mochila.