Que levante la mano quien no haya escrito nunca con un boli BiC, los de toda la vida, aquéllos que tenían un anuncio en televisión que decía “BiC naranja escribe fino; BiC cristal, escribe normal” y que nos quedó grabado a fuego en la memoria. Seguramente todos o casi todos los que pasamos el instituto en los años 90 recordamos la cantidad de bolis que llegábamos a gastar en un curso escolar, y muchos recordaremos los juegos que podíamos hacer con la tapa del BiC o con las propias carcasas.
Es por eso que el BiC Cristal Stylus es, por decirlo así, la evolución del boli BiC de toda la vida, pero adaptado a los tiempos que corren. Y son tiempos táctiles, llenos de pantallas de smartphone, de tablets, de docks para dibujar en el ordenador. Y todo en la vida se reduce a adaptarse o desaparecer, y es por ello que este boli conjuga lo mejor de dos épocas: la época del boli BiC y el escribirlo todo en papel, y la moderna época actual en la que anotamos todo en nuestras pantallas, lo compartimos en la nube y navegamos para conseguir lo que necesitamos.
El BiC Stylus es un boli normal, pero con una goma en la parte trasera del mismo (sí, donde todos mordisqueábamos con nerviosismo durante las clases, o más frecuentemente, durante los exámenes) que nos permite dibujar, escribir y pulsar en las pantallas táctiles. Es curioso porque podemos darle una segunda vida al boli cuando gastamos la tinta, algo que en los modelos más antiguos era poco probable. Para un activo usuario de los bolis BiC es un gusto saber que se han adaptado a los tiempos que corren y que, además, han traspasado la barrera del papel para dar el salto a la pantalla táctil.