Aunque no ocupen tantos ríos de tinta, los mandos para convertir smartphones en consolas para sacar el máximo partido a los juegos son una de las tendencias más interesantes que hemos visto en el MWC.
La estrella, sin duda, es el Samsung GamePad, que salió a la venta en Alemania las pasadas navidades y que se espera que llegue a España en las próximas semanas.
Se trata de un mando con la mayoría de las utilidades de uno de sobremesa, pero en lugar de al PC o la consola está destinado a los smartphones del fabricante coreano.
Pero no se trata ni mucho menos del único dispositivo de este tipo. Así, SteelSeries ha presentado su Stratus, un mando que además nos trae 40 juegos pensados especialmente para disfrutar con él.
Logitech, uno de los fabricantes de periféricos más populares, también se ha lanzado al mercado de los mandos para smartphones de la mano de Powershell. En lo que a prestaciones se refiere, no está demasiado lejos del GamePad, aunque su tamaño puede resultar demasiado voluminoso y su precio se encuentra por encima de los 60 euros por los que el dispositivo de Samsung se vende en Alemania.
Los smartphones con mando son el término medio perfecto para aquellos que piensan que es mucho más cómodo jugar en una consola portátil, pero resulta muy pesado cargar con dos dispositivos pudiendo instalar juegos en el smartphone. Si los desarrolladores de juegos se ponen serios y ponen tanto empeño en crear títulos para móviles que para consolas, puede que el fin de las portátiles esté más cerca de lo que pensamos.