Uno de los problemas más habituales (y más molestos) que podemos encontrar en nuestro smartphone es que conectemos el cargador y veamos que no podemos cargar la batería. Pero antes de desesperarnos, es importante intentar averiguar de dónde procede el problema:
1.- Comprueba que esté todo bien enchufado
Puede parecer una obviedad, pero muchas veces nos asustamos creyendo que nuestro móvil no carga y lo que pasa es que hay algo mal enchufado.
2.- Intenta pensar qué puede fallar
Hay tres opciones: que sea problema del teléfono, que sea el cargador, o que lo que esté fallando sea el cable USB. A partir de ahí, es momento de ir descartando.
3.- Prueba con otro cable
Conecta otro cable USB a tu cargador y vuelve a probar a ver si así funciona. Si es así, y es el cable lo que se te ha estropeado, estás de suerte, ya que un cable es muy barato y no te va a suponer un desembolso muy grande acabar con tu problema. Podrás encontrar un cable nuevo en cualquier tienda de electrónica.
4.- Cambia el cargador
Si no es problema del cable, es el momento de mirar si lo que se ha estropeado es el cargador. Hoy día, sobre todo en los móviles Android, todos los cargadores son iguales, por lo que no será difícil encontrar alguien que te preste uno, incluso puede que tengas uno antiguo en casa. El precio de un nuevo cargador, si nos vamos a marcas originales y no hacemos experimentos, puede salir por unos 30 euros.
5.- Comprueba si lo que falla es el conector
Si ni con otro cargador funciona, prueba a mover el cargador dentro del móvil. Si hay algunos puntos en los que sí carga, entonces el problema está en el conector de tu smartphone. Aquí no hay más remedio que ponerse en contacto con el servicio técnico, aunque si el móvil está en garantía puede que tengas suerte.