Pocos hubieran imaginado hace unos años que Android, el sistema operativo de Google, iba a llegar a abarcar prácticamente todo tipo de dispositivos.
Obviamente, smartphones y tablets son los dispositivos en los que encontramos Android más habitual. Pero los smartwatches, como los lanzados por Samsung o Sony, han hecho llegar el sistema operativo de Google a nuestra muñeca.
En cuando a los intentos de Google por introducirse en el mundo de la televisión, su Google TV no ha terminado de despegar, al menos por ahora. Sin embargo, cada vez son más los hogares que apuestan por los sticks de Internet TV, que nos permiten disfrutar de Android y conexión a Internet en nuestro televisor.
Las consolas Android son otro espacio que no ha terminado de popularizarse, pero en el que cada vez se hacen más incursiones. Así, Ouya o Nvidia Shield son sólo algunas muestras del potencial que tiene el sistema operativo de Google para los aficionados a los videojuegos.
En cuanto a los ordenadores, Windows e incluso Mac siguen siendo los reyes, al menos en este lado del globo. Pero en Asia es cada vez más habitual ver PCs que funcionan con Android, que al ser un sistema libre es mucho más barato y cubre las necesidades básicas de los usuarios principiantes.
Estos son solamente algunos ejemplos, pero las posibilidades de este sistema operativo más allá de los smartphones y las tablets son prácticamente infinitas. Ya hemos visto las Google Glasses, que introducen Android en unas gafas, y basta con darse una vuelta por Kickstarter para encontrar decenas de artículos de domótica basados en este sistema. Sólo el futuro podrá decirnos dónde está el final.