El fin de los teléfonos atados a una operadora pude parecer una utopía, pero lo cierto es que no está tan lejos como podríamos imaginar. Y es que Telefónica se está planteando la posibilidad de vender todos sus terminales libres, de modo que puedan usarse con tarjetas SIM procedentes de otros operadores. Esto supondría una verdadera revolución para todo el sector.
Esta medida estaría muy relacionada con el fin de la subvención a terminales para nuevos clientes, que llevo a cabo la operadora en marzo, “obligando” a seguirle a compañías de la competencia como Vodafone. Una vez que ya no existen las subvenciones, ahora Telefónica se plantea acabar con el SIM lock o bloqueo de terminales, que los convierte en esclavos, y que no permite a sus abonados operar con la tarjeta de otra compañía.
Precisamente fue Telefónica la compañía que se encargó de inventar el SIM lock, y curiosamente es ahora la que se plantea hacerlo desaparecer. Pero es que en estos años el mercado de la telefonía móvil ha cambiado mucho. Ahora todo el mundo tiene un teléfono móvil, y ya no existen subvenciones que inviten a los usuarios a adquirir uno atado a una compañía. Por lo tanto, ahora parece mucho más lógico que haya personas que prefieran comprar un móvil libre que uno que sólo se puede usar con una operadora.
Los responsables de Telefónica son conscientes de que esta medida podría arrastrar al resto de operadoras que aplican también la política de móviles esclavos, pero se sienten orgullosos de que sea Movistar la que marque el camino:
“Tenemos la obligación de apuntar la línea por donde va el sector. Siempre uno tiene que haber uno que sea el primero, y hemos demostrado que no tenemos miedo. No sé si este será el próximo salto, pero lo estamos estudiando”.