La red social de los 140 caracteres quiere que lo que suceda se quede en casa. El tema es que casi nada de lo que sucede en el mundo real no suele quedarse ahí, sino que se cuenta en Twitter, que recientemente ha hecho una demanda en contra el gobierno estadounidense debido a las sucesivas peticiones sobre datos de sus usuarios.
Ben Lee, vicepresidente de temas legales, explica en el blog: “Creemos tener el derecho, según la Primera Enmienda, de responder a las preocupaciones de nuestros usuarios y a las declaraciones de funcionarios del gobierno estadounidense al facilitar información sobre el alcance de la vigilancia del Gobierno estadounidense”.
Para el gobierno americano tanto la Agencia de Seguridad Nacional (NSA) como la policía federal (FBI) defienden el país ante amenazas reales por lo que es necesario tener acceso a la información de las empresas tecnológicas, especialmente las redes sociales.
Twitter se rehúsa a hacer comentario alguno más allá de lo expresado en el blog. En el mismo insisten en que la mayor parte de los comentarios publicados en sus servicios son públicos y las peticiones que reciben del Gobierno no son numerosas.