El Gobierno de España llevaba tiempo siguiéndoles la pista a los cada vez más populares drones voladores, dispositivos controlados remotamente y que se utilizan principalmente para realizar filmaciones y tomas aéreas de eventos. Esta semana se ha puesto sobre la mesa una nueva Ley que pretende regular este nuevo segmento en auge.
En esta futura ley se pretende establecer los diferentes tipos de drones –a partir de ahora se les considerará como aeronaves-, las limitaciones que se permitirán así como los usos que se les podrá dar, se acabó el poder usarlo para todo lo que se nos ocurra y por supuesto, nada de sanfermines.
Un dron volador para uso civil de menos de 150 kilos de peso -uno de mayor peso es de uso militar-, requerirá de un carnet especial, un carnet de piloto de drones donde se especificará los requerimientos que debemos tener para conseguir uno así como las condiciones donde podremos usar nuestro dron.
Al tratarlos como aeronaves, deberán cumplir con la legislación vigente de este grupo y por ejemplo, no podrán sobrevolar por las calles de una ciudad sin una autorización previa. El principal uso que quiere el Gobierno para estos drones será el de la filmación de películas, vigilancia de costas, bosques e investigación en plena naturaleza. Puntualmente se dará autorización para otros usos.
Tiene sentido que los drones no pueda volar sobre nuestras cabezas, por aquello que tienen una autonomía y alcance limitado y se podrían caer sobre nosotros, aunque otras medidas nos parecen excesivas y algunos usuarios ya hablan de medidas de censura y afán recaudatorio. ¿qué será de las empresas audiovisuales que tanto han invertido en estas tecnologías?
Vía | Xataka