Sorprendentemente, la Real Academia Española no tiene un significado para la palabra hacker. Sin embargo, Wikipedia sí: Comunidad de aficionados a la informática doméstica, centrada en el hardware posterior a los setenta y en el software (juegos de ordenador, crackeo de software, la demoscene) de entre los ochenta/noventa.
Los hackers son así: personas curiosas, que investigan más allá de lo normal, apasionados por la tecnología, capaces de encontrar las fallas o vulnerabilidades y explotarlas de modo ético. Esta última palabra es lo que los diferencia de los crackers, personas que también son apasionadas por los sistemas de cómputos, pero que lo hacen con fines económicos y destructivos.
Sin embargo, ¿cómo surgió el término? Quien lo acuñó por primera vez fue una mujer, Grace Murray Hopper, una graduada en matemáticas y física en el Vassar College, quien se asimiló en la Marina de Guerra de los Estados Unidos, llegando a ascender al grado de Almirante. Murray se dedicó a investigar acuciosamente las posibilidades de programación en las computadoras, de la Primera y Segunda Generación. Sus compañeros de trabajo comentaban que ella trabajaba como un “hacker”.
Durante la segunda guerra mundial, mientras trabajaba en su computadora Mark I, la almirante Hooper se dedicaba intensamente a sus experimentos. A ella se le atribuye la creación del lenguaje Flowmatic, razón por la cual desarrolló muchas aplicaciones y en 1951 produjo el primer compilador, denominado A-0 (Math Matic). En 1960 presentó su primera versión del lenguaje COBOL (Common Business-Oriented Language).