Hasta ahora, el iPhone 5 era el objeto de deseo de todo aficionado a la tecnología. Pero marcas como HTC y, sobre todo, Samsung, no han cesado en sus intentos de plantarle cara con terminales de igual o mejor calidad. Y ha sido el Samsung Galaxy S4 el que, al menos en prestaciones y relación calidad-precio, parece que lo ha conseguido. Al menos eso es lo que ha publicado la sección de tecnología de El País, que en una puntuación de los últimos modelos en salir al mercado coloca a lo nuevo de Samsung en primer lugar.
El problema con el que se pueden encontrar para alcanzar al iPhone en ventas es que parte de su público potencial ya se gastó un dinero hace unos meses en el S3. El reto de la marca es convencerlos de que vuelvan a invertir por una apuesta no demasiado diferentes. Y es que el S4 no es muy diferente al S3, por lo menos físicamente. La pantalla es un poco más grande, y la cámara pasa de 8 megapíxels a 13, pero el diseño es prácticamente el mismo, y también está hecho en plástico, lo que hace que el terminal pese menos. Un detalle que unos aman y otro odian. También aumenta un poco la batería, pero sigue sin ser suficiente, ya que su corta duración sigue siendo irritante. Donde sí hay más diferencia es en el interior, ya que los cambios en el software sí son más llamativos.
Si el Samsung Galaxy S4 es realmente el terminal que acabe con la hegemonía del iPhone en el mercado de los smartphones de alta gama es algo que no podremos decir con propiedad hasta que hayan pasado algunos meses. Pero, de momento, lo que sí podemos asegurar es que quienes lo han probado consideran que no sólo no tiene nada que envidiar al de Apple, sino que incluso lo supera.