Las impresoras 3D están llamadas a dejar de ser un objeto casi de ciencia-ficción cuyo aterrizaje en el mundo real está reservado a industrias y millonarios. Y es que un grupo de investigación de la Universidad Politécnica de Cataluña ha desarrollado un modelo, que llevará por nombre BCN3D, destinado al ámbito doméstico, con un precio que estará por debajo de los 900 euros.
La impresión 3D, capaz de fabricar piezas de todo tipo a partir de un diseño hecho por ordenador, está llamada a protagonizar una revolución tecnológica de la manufacturación, ya que cualquier persona puede fabricar un producto ideado por ella desde su casa, sin tener que realizar grandes inversiones en maquinaria o en personal técnico especializado.
Por el momento, los principales compradores de la BCN3D están siendo pequeños negocios. Pequeños despachos de arquitectura o estudios de ingeniería son lo más interesados en esta impresora tridimensional. Pero sus creadores esperan que en el futuro su uso pueda extenderse a otros campos, como las imprentas o los pequeños emprendedores que encuentren la forma más económica de dar vida a sus productos.
Lo cierto es que el campo de posibilidades que puede llegar a abarcar la impresión en 3D aún está por conocerse. Se trata de una tecnología que apenas está instaurada a nivel empresarial, y mucho menos aún a nivel doméstico. Pero el lanzamiento de productos como esta BCN3D, que tiene un precio relativamente asequible, puede hacer que imprimir un proyecto en tres dimensiones deje de parecernos cosa del futuro.
De hecho la tecnología de las impresoras en 3D fue destacada por Barack Obama en el último discurso del Estado de la Unión como una verdadera revolución en el sector industrial.
