El CES está prácticamente clausurado y entre tantas pantallas 4K, pantallas flexibles (sin duda las cosas que más se han visto en esta edición) hemos tenido muchas novedades en cuanto a fotografía se refiere. Pentax no quería perderse la feria y han mostrado su nueva carta donde antes nunca habían jugado, en el mercado de las compactas de gama alta. Llegan a este mercado con la Pentax Mx-1.
A primera vista estamos ante un diseño retro exquisito, quizás porque se han fijado en Fuji y han comprobado lo bien que les ha ido a sus competidores y a los consumidores avanzados en general, donde este tipo de diseños suelen triunfar. Si nos fijamos en sus características técnicas, la nueva Pentax MX-1 cuenta con un sensor retroiluminado CMOS de 12 megapíxeles y un objetivo luminoso de nada menos que una apertura de f/1,8 a f/2,5, que además proporciona un zoom de cuatro aumentos y estabilizador de imagen SR.
En una compacta de estas características, no faltan los diales y controles manuales para los usuarios más avanzados ni el disparo en RAW, además de la capacidad de grabar vídeo a 1080p con 30 fotrogramas por segundo. Otros detalles son el Flash oculto en la carcasa y su pantalla de 3 pulgadas que además es abatible.
Por mi parte lo único que le hecho en falta es el GPS para la geolocalización de las fotos, así como WiFi para compartirlas o transferirlas al ordenador, algo cada día más presente en las cámaras de fotos y que una cámara de 500$ me parece que debería de llevar en 201.
Vía | Fotosfera