Nokia y Microsoft se están jugando una carta muy importante de la mano de la franquicia Lumia. Los finlandeses necesitan volver al buen camino en el mercado de smartphones y los norteamericanos están obligados a tener éxito para que la expansión de Windows Phone sea más agresiva.
Lo cierto es que un informe de International Data Corportion asegura que durante el primer trimestre de 2012 sólo se distribuyeron 2.2 millones de smartphones Lumia en Estados Unidos. La cifra abarca los equipos que fueron entregados a las tiendas, no a los compradores. El número de usuarios todavía es un misterio pero sería aún más bajo.
Las cifras de IDC nos ayudan a entender por qué Nokia hasta ahora no brindó estadísticas oficiales sobre sus móviles inteligentes con Windows Phone. La fuerte apuesta al sistema operativo de Microsoft por ahora no dio el resultado esperado y los números lo ponen en claro. Pero no todo está perdido.
En la estadística no están incluidos los números de Lumia 900, el teléfono más destacado que Nokia ha presentado en los últimos meses. El dispositivo fue lanzado en abril en Estados Unidos y hasta el momento ha conseguido un altísimo nivel de conformidad entre los usuarios.
Los analistas de IDC indican que el lapso “primavera-verano” en Estados Unidos cambiará el -hasta ahora- magro presente de Nokia y Windows Phone. Habrá que ver qué ocurre con Lumia 900 cuando termine el actual trimestre. De todas maneras, si los finlandeses dependen del éxito de un solo móvil cuando tienen otros tres en el mercado (610, 710 y 800) quiere decir que existe una falencia que debe ser solucionada.
Vía | Engadget.