Un 20%, que en ocasiones llega a ser un 50%. Este porcentaje es el de los europeos que tienen contratada una conexión a Internet desde el móvil que no les permite acceder a servicios de VozIP o a redes de intercambio de archivos P2p. Si en vez de a Internet móvil nos referimos a las redes de banca anda fijas, la prohibición del uso de P2P en horas puntuales, que suelen coincidir con las que más se utilizan, puede alcanzar incluso al 95% de los usuarios de una misma nación, aunque no tenemos datos de a qué país se refiere.
Neelie Kroes, vicepresidenta de la Unión Europea, está dispuesta a luchar por que se acabe esta situación. La dirigente, a la que se conoce popularmente como “el azote de las telefónicas” también pretenden que los usuarios sepan exactamente no sólo cuál es el ancho de banda que tienen contratado, sino también cuánto de ese ancho de banda se pierde por el camino y no llega a ser utilizable.
Otra de las peticiones de Kroes es que los usuarios puedan saber con exactitud cuáles son los límites del servicio que tiene contratado. Es decir, que si nuestra operadora no nos permite acceder a servicios VozIP o a redes P2p, deben anunciarlo de forma clara incluso en su publicidad, para que nadie se lleve a engaños.
Esta decisión de intervernir para defender los derechos de los usuarios llega un año después de que la propia Kroes solicitara la creación de un informe sobre la situación de las operadoras en cada país. Este informe ya está disponible, pero no aparece desglosado por países, por lo que no podemos conocer con exactitud cuál es la situación en España, aunque siempre hemos tenido “fama” de ser uno de los países más caros.