Una de las ventajas que muchos vieron con la llegada de los libros electrónicos era que cualquier podía editar su propia obra y distribuirla libremente a través de Internet. Pero esto no es exactamente así. O sí, pero no es gratis. Y es que para que podamos comercializar un libro necesitamos su código ISBN, y esta entidad de gestión nos cobra 45 euros por cada obra que registremos, aunque el servicio era gratuito hasta el diciembre pasado.
Esto no suele suponer un problema demasiado grande para los editores de libros en papel, ya que al precio que se venden estos no se necesita vender más de 2 ó 3 ejemplares para amortizarlo. Pero en el caso de los libros electrónicos, que rara vez se venden por más de 2 ó 3 euros, no compensa comercializarlos a no ser que estemos muy seguros de que vamos a vender al menos 15 ejemplares, lo que retira de la carrera editorial a muchos escritores noveles.
Pese a que el ISBN justificó que empezaba a cobrar para mantener una nueva plataforma tecnológica, por lo visto, no tuvieron en cuenta que muchos escritores estarían interesados en publicar su obra en forma de e-books.
El procedimiento que tenemos que seguir para registrar un e-book es el siguiente:
1. Primero tenemos que darnos de alta en el ISBN abonando los correspondientes 45 euros.
2. Si el registro lo hemos realizado en fin de semana, el mensaje con el nombre de usuario y la contraseña para acceder al formulario para rellenar los datos del libro no nos llegará hasta el jueves de la siguiente semana.
3. Cuando hayamos rellenado el formulario asegurándonos de que no hayamos cometido ningún error, tendremos que esperar 3 ó 4 días hasta que recibamos un correo con la contraseña para acceder al ISBN.