A primera vista parece una copia del LG Optimus 2X o el Black, los últimos modelos de esta compañía que han sido presentados este mismo mes. Al dar la vuelta al robusto teléfono Optimus 3D es cuando nos daremos cuenta de que se trata de algo muy diferente. Dos cámaras traseras de cinco megapíxeles delatan sus intenciones y es que este nuevo teléfono móvil nos da la opción tanto de grabar vídeo como de realizar fotografías en tres dimensiones. Para conseguir el efecto y hacer que la gestión del flujo de información sea ágil, casi sin esperar, la memoria RAM de este teléfono llega casi a duplicar la de su predecesor. El efecto se completa con la pantalla, de 4,3 pulgadas, que da sensación de profundidad sin tener que ponerse gafas. El terminal tiene salida HDMI para reproducir el contenido en TV en 3D, aunque para verlo en pantalla grande sí serían necesarias las gafas. El teléfono, con ocho gigas de memoria ampliables con tarjeta MicroSD, tiene preinstalados algunos juegos también en 3D y un acceso directo a vídeos de Youtube.
Óscar Rodríguez, director comercial de LG, no se preocupa por su escasez. Y es que la principal apuesta de este teléfono es que sean los propios usuarios los que creen los contenidos y los compartan, frete a otros modelos que se basan en el acceso a contenidos ya existentes.
Android es una vez más el sistema operativo con el que funcionará este teléfono. Uno de los aspectos más polémicos son las actualizaciones. En este caso, dado lo peculiar de la pantalla, no llegarán de inmediato. Lo que también puede suponer un problema es la duración de la batería. Aguanta un día de uso normal, es decir, correo, navegación y alguna foto. El teléfono, que llega en julio con Vodafone, tiene un precio que puede oscilar entre los 0 y los 219 euros dependiendo del contrato.