Visto lo visto en los últimos meses, acceder a las aplicaciones online de los videojuegos puede llegar a ser un juego peligroso. Y es que a los problemas recientemente sufridos por PlayStation se le suma el ataque que Sega Pass, el servicio de juegos online de la conocida marca de juegos, ha sufrido en su base de datos en los últimos días.
Según ha confirmado la propia compañía en un comunicado reciente, se calcula que hay aproximadamente 1,3 millones de usuarios cuyos datos habrían estado accesibles para los hackers durante varias horas. Entre estos datos se encuentran nombres completos, fechas de nacimiento, direcciones de correo electrónico y datos encriptados. Un desastre para todos los que confiaron en dar sus datos para jugar online en este tipo de juegos.
La propia dirección de Sega ha sido la encargada de informar a los afectados del ataque que han sufrido sus datos a través de un email. En él aseguran que lamentan mucho lo ocurrido y que están trabajando para mejorar sus sistemas de seguridad de forma que no vuelvan a ocurrir ataques de este tipo.
Para evitar que vuelva a haber problemas hasta que los “agujeros” del sistema hayan sido cerrados, la empresa japonesa se ha decidido a cerrar temporalmente Sega Pass. De momento no se sabe hasta cuándo se impedirá a los usuarios volver a jugar online, pero la empresa no quiere arriesgarse a que su imagen vuelva a verse dañada a causa de este tipo de problemas de seguridad.
Claro que ya no existe forma de impedir que los hackers utilicen los datos que ya han sido robados. El pasado jueves se tuvo noticia de que había sido atacada la base de datos, pero no se sabe cuál es el alcance real de los daños.