Ayer os invitábamos a ver el documental ¡Copiad Malditos!, dirigido por Stéphane M. Grueso para RTVE. Hoy repasaremos la actualidad en lo referente a lo que ha supuesto Internet para cambiar las reglas, crear nuevas formas de negocio así como expandir la Cultura.
Hoy en día la gran mayoría de Españoles disfrutamos de disponer de un (aún caro y lento) acceso a Internet en nuestros hogares, algunos incluso acceden a Internet a través de su teléfono móvil, tablet o a través de un modem USB; Internet está presente en nuestras vidas, eso ya nadie lo duda. Actualmente incluso los programas de televisión, la radio, los periódicos hacen uso de dicha tecnología para llegar aún a más gente, además que lo utilizan para ampliar sus contenidos, darse publicidad, realizar encuestas etc.
Se ha llegado a decir incluso que si no pertenecemos a una de las muchas redes sociales del momento “no eres nadie”, algo con lo que yo no estoy de acuerdo, pero reconozco que hoy en día es algo que tiene muchísimo peso socialmente hablando. Dichas empresas, así como los medios de comunicación lo saben, y por eso muchas de ellas disponen de un perfil en cada red social para estar aún más cerca de la gente a la que quieren llegar, así como también lo hacen muchos famosos, artistas, e incluso muchos políticos.
Internet abrió hace tiempo las puertas al negocio a través de la red, de hecho casi podría afirmar que muchas de las empresas más importantes del mundo han hecho negocio a través de y gracias a Internet, hablo de Google, Facebook, Apple, Amazon, eBay, Netflix, Microsoft, Yahoo etc. Todas ellas son multinacionales que han basado su negocio a través de la red, acercando al usuario una nueva manera de ver y crear cultura haciéndola mucho más cercana y asequible.
Si Apple con iTunes y la AppStore ha hecho un negocio multimillonario (vendiendo música, software, libros y películas), cómo Netflix lo está haciendo (a través de una reducida cuota mensual) haciendo llegar el cine y las series a sus usuarios, o cómo Spotify está empezando a crecer como la espuma, a consecuencia de poder escuchar millones de canciones por 5€ mensuales (e incluso gratis)… ¿Cómo diablos lo hacen? La respuesta es muy simple: ofrecer lo que se demanda a un buen precio y de una manera muy cómoda. Ese es el secreto para plantar cara a la piratería (mal llamada piratería), acusada de ser la causante de los quebraderos de cabeza de las grandes multinacionales discográficas y productoras.
Puede que haya tenido parte de culpa pero… ¿Por qué su negocio está cayendo en saco roto? Sencilla respuesta de nuevo; está obsoleto, por su planteamiento y precios. ¿Quién va a comprar un disco, una película, la temporada de nuestra serie favorita… teniendo los servicios que hemos comentado anteriormente? Únicamente aquellas personas a las que le guste disponer de un formato físico para agrandar su colección, quizás para hacer un regalo (por ser tangible) o bien para los fans. Estas ventas no suponen lo que una multinacional necesita para sobrevivir, por lo que los servicios de los que hablaba, unidos a la piratería, les están haciendo caer en picado, puesto que los ingresos que deberían llevarse, se lo están llevando otros con un modelo de negocio mejor, que vende lo mismo que ellos, a mejores precios.
Nadie en su sano juicio comprará un disco por 18€, teniendo Amazon o eBay (formato físico a unos mejores precios), o bien iTunes o Spotify (formato digital a mejor precio, inmediato y sin moverse de casa). Lo mismo sucede con servicios como Netflix o Hulu, puesto que podemos ver películas o series desde nuestro sofá, cuando nos dé la gana,con gran calidad, sin publicidad, las veces que queramos y sin tener que esperar una semana para ver el siguiente capítulo (aclaro que dichos servicios no están disponibles en nuestro país, sin embargo existen en otros y creo que son el modelo a seguir).
Ahora bien, la piratería (la mal llamada piratería) ha hecho mucho daño a la industria, esto hay que reconocerlo, pero también ha tenido sus cosas buenas, quizás muchas más que malas, puesto que ha planteado un nuevo modelo de negocio y distribución además de hacer crecer la Cultura (y todo esto gracias a Internet), la ha hecho crecer gracias a que las personas que se han descargado música o películas, han conocido a través de ella muchos más grupos, muchas más películas o series, han mejorado su inglés (gracias a ver dichas películas en versión original) o han podido leer muchísimos más libros de los que se hubieran podido comprar en la calle. Todo esto también es Cultura, no sólo la que se puede ver en el cine, en el teatro, leyendo un libro de 500 páginas o bien escuchando un CD recién comprado, aunque le pese a algunos.
Esa nueva forma de entender en negocio digital, ha sido llevada a la legalidad a través de las empresas que he comentado anteriormente, aunando lo que la gente busca de la piratería (formato digital, inmediatez, cantidad, sin publicidad) y haciendo negocio con ello (por sus precios asequibles, sin moverte de casa y la comodidad que eso supone), volvemos a desvelar el secreto del éxito.
Par finalizar, os voy a poner un ejemplo de cómo está hoy en día el panorama, para poner en entredicho el modelo de negocio obsoleto de las discográficas: ¿cómo diablos voy a introducir la música del CD que acabo de comprar por 22,95€ en mi teléfono? el procedimiento es, cuanto menos tedioso, puesto que tendremos que introducir dicho CD en el ordenador, transferir los archivos, conectar el teléfono por USB o Bluetooth y transferirlos a su memoria, para después olvidar el CD en la estantería para jamás volver a abrirlo. Bien, es factible, pero...¡No tiene ningún sentido hoy en día! Observad las imágenes:
¿No sería mejor haber comprado dicha música (con igual formato) en Amazon a mejor precio? O mejor aún, ¿por qué no comprarlo en formato digital en la misma tienda, aún más barato incluso, conectar el teléfono para transferir los archivos y listo? Os propongo otra vía digital, contratar Spotify premium (10€) y disponer no sólo de ese disco, sino de todo lo que te de la gana, incluso offline. El usuario sale ganando, su estantería también e incluso gana el medio ambiente (materias primas, distribución etc.) ¿Quién no sale ganando? Evidentemente las personas que no han sabido adaptarse a los tiempos que corren.
Solo tengo una cosa más que decir:
Gracias, Internet, gracias por hacerme llegar tantísima cultura.
Información Bitacoras.com…
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